Cuando me mencionaron la existencia del deporte de nado sincronizado, lo primero que pensé fue que era una modalidad de las competencias de natación. Ya me imaginaba a tres personas nadando ida y vuelta con una rutina. Pero gracias a Virginie Chevalet, una nadadora francesa que quiere introducir este interesantísimo deporte en el país, aprendí que el nado sincronizado es en realidad muchos deportes hermosos amalgamados en uno aún más lindo.
Imagínense una rutina de porristas, saltando en el aire, haciendo piruetas y paradas de mano. Después imaginen a las gimnastas artísticas haciendo coreografías que requieren una flexibilidad y fuerza que parece sobrehumana para cuerpos tan pequeños y compactos. Y finalmente a unas bailarinas, bailando con gracia y precisión al ritmo de la música. Y para terminar, imaginen a todas estas personas haciendo todo y cada uno de esos deportes en el agua. Eso es básicamente el nado sincronizado, practicado por chicas (y en pocos casos hombres), que tienen que ser excelentes en todas esas disciplinas y poder hacer una rutina con música bajo el agua a la perfección.
Todas visten la misma malla (generalmente colorida y brillante), el mismo peinado (que requiere una mezcla especial de gelatina para quedar bien duro) y pincitas para la nariz así no tragan agua. Con este grupo, presentan una coreografía que se realiza bajo el agua. Escuchan la música, gracias a parlantes sumergidos en la piscina, y probablemente lo más asombroso de todo esto, es que lo que hacen sin tocar el piso de la piscina porque eso las descalifica. Eso quiere decir que cuando ven a una nadadora impulsada al aire, es completa y totalmente gracias a la fuerza de la chica que la impulsó.
Virginie es una nadadora que practica el nado sincronizado desde chica, y presentó un proyecto acá en Paraguay para abrir un club de natación dedicado al deporte. Ama el agua, y desde que nació que lo único que quiso era nadar y por ello practicó la natación regular mucho tiempo. También le atraía mucho la gimnasia artística, pero en un momento tuvo que elegir entre un deporte u otro. Entonces se dio la oportunidad de practicar el nado sincronizado, que es el combo perfecto de ambos. En el club donde practicaba, siempre se hacían competencias internas, e incluso competían a nivel nacional. Eso es lo que ella quiere lograr acá, abriendo el club en Areguá, donde vive actualmente.
Lo hermoso de este deporte –y lo que más le gusta a Virginie de él–, es que son muchas disciplinas en uno, y por lo tanto, nunca aburre. Requiere de fuerza, gracia, flexibilidad y, sobre todo, mucha práctica. Aparte de todo esto, hay que aprender a respirar bajo el agua. Sí, respirar bajo el agua, porque cuando salen a la superficie no pueden demostrar cansancio.
Las competencias olímpicas vienen en tres modalidades: solo, dúo y grupal. Hace poco se abrieron otras dos modalidades, la temática y la combinada (en la primera se permite usar accesorios para hacer mas creativas la coreografías y la segunda combina las rutinas de dueto, solo y equipo en una sola rutina global.
Puesto que la técnica evoluciono enormemente desde su aceptación del Nado Sincronizado como deporte olímpico en 1984, estas nuevas modalidades buscan desarrollar el lado artístico de la disicplina.
A pesar de ser un deporte masculino en sus orígenes, a nivel olímpico solo se reconoce el nado sincronizado femenino.
No se requiere de un estereotipo físico, pero es un hecho que si uno no está en forma y no tiene fuerza, no va a poder aguantarlo.
Virginie compitió en el torneo nacional de francia, donde en una de las categorias alcanzó la medalla de plata por equipos en el 2003 . Compitió por Paraguay en los juegos ODESUR de Colombia en el 2010. Como todavía no existe un equipo nacional, participó sola, pero no es la modalidad que más le gusta.
Para prepararse para el torneo en Colombia, incluso tuvo que practicar en el lago Ypacaraí porque no tenía dónde practicar. Fue todo un desafío para ella retomar la práctica, ya que había dejado el deporte por varios años. Debido a unos problemas de salud, después de mucho esfuerzo y empujada por el amor que le tiene al deporte, pudo volver a meterse al agua.
Virginie presentó un proyecto de desarrollo del nado sincronizado a la federación paraguaya de natación y a la secretaria nacional de deportes de quienes espera una respuesta para formar el primer equipo de nado sincronizado del país.
Pero de la misma manera tiene negociaciones mas avanzadas con el gobernador del departamento central Carlos Amarilla para llevar adelante un proyecto de desarrollo de este deporte en Aregua.
Con empresas interesadas en apoyar esta iniciativa, con un sitio web (www.sincroparaguay.tk) que para su sorpresa tiene mas de 1000 visitas de todas partes del mundo y un blog que con menos de 10 diez días on line ya se acerca a las 300 visitas, demostrando el interés de la gente, esta mas que ilusionada en recibir el “si” oficial de las autoridades deportivas para empezar a entrenar con sus primeras atletas.
Le deseamos éxitos, y vamos a estar ahí apoyándolas desde lejos. ¿Y por qué no?, hasta participando algún día.
Fuente: Revista VOS
Por Eliana Gonzalez
Fotografia: Ralphie Zotti
Agradecimientos: Col. Apostolico San José
No hay comentarios:
Publicar un comentario